Farándula: una comedia sabrosa, pero peligrosa

A pesar de que Farándula se estrenó el pasado viernes 2 de marzo en la sala Adolfo LLauradó de la Casona de Línea, no es una obra desconocida para los transeúntes capitalinos pues gigantes carteles inundaron desde hace cerca de un mes, las avenidas y arterias principales de la ciudad.

A decir de su director el joven Jazz Vilá, la propuesta es una “fantasía escénica con la que se propone dar continuad a su empeño por conquistar a los jóvenes espectadores y hacer del teatro un sitio de reflexión desde el entretenimiento”.

“La idea es acercarnos al público joven que no va al teatro. El nombre de la obra nació espontáneamente, y no es que sea de gente farandulera, nos referimos a esa otra farándula que etimológicamente significa grupo de artistas que va a crear”.

Con un texto inédito que utiliza el flashback como recurso dramático, se narra la intimidad de cuatro personajes desconocidos pero atados entre sí en una cadena de sucesos que acaecen en solo 24 horas.

“Esta es una comedia agitada”, comenta Camila Arteche quien interpreta el personaje de Sara, “su conflicto principal es la incomunicación y toca ligeramente temáticas profundas como la migración, la soledad, la corrupción y de manera discreta establece un cuestionamiento sobre dónde están los límites entre los artístico y lo inmoral”.

Concebidos desde una manera minimalista los entornos escenográficos de la puesta utilizan solo un sofá como pieza central y leitmotiv de la acción dramática, a la vez que incluyen obras plásticas alegóricas a la descripción psicológica de los personales haciendo un particular enfoque en el trabajo actoral.

La obra cuenta con un elenco joven y fresco que dobla los personajes en aras de mantener el ritmo de las presentaciones.

La pieza estará en cartelera iniciáleme todo el mes de marzo de martes a domingo en los horarios habituales de la pequeña sala de Línea entre D y E en el Vedado capitalino.

El personaje de Sara estará compartido por la ya mencionada Arteche y Anabel Suárez. Elena, por la mutipremiada Yordanka Ariosa, Cynthia Paredes, Beatriz Guillen y Mónica Baute.

Por su parte, el rol de Lorenzo será doblado por los actores Carlos Busto, Jomy Marull y Gabriel Richard. Por último, El Yoyo será interpretado por Omar Rolando y Carlos Solar.

Jazz Vilá Projects contará en su haber con tres obras con estética y temáticas similares. “Si Rascacielos fue una suerte de montaña rusa y Eclipse un parque de diversiones, Farándula será volver al principio de la montaña rusa con la experiencia de ya haberla montado y poder disfrutar más lo que está pasando”, confiesa Vilá.

El proyecto de manera general destaca por la economía y sencillez de los elementos escenográficos, la inclusión de mecanismos pioneros de co-producción dentro del teatro contemporáneo cubano, el desarrollo de fuertes campañas promocionales y la colaboración con importantes artistas nacionales y foráneos de diversas manifestaciones.

Con un repertorio bilingüe y en apenas tres años desde su fundación, la agrupación se ha consolidado con presentaciones en festivales y giras en Cuba, República Dominicana y Estados Unidos.  Con un objetivo claro: recuperar la atención del público juvenil a través de temas como el amor, la diversidad, la sexualidad, el miedo y la incomunicación.

Entonces, como ya nos tiene acostumbrados, Vilá propone una obra con un montaje sencillo y una gran frescura que mezclará el teatro con las artes visuales y un tema musical compuesto por Osmany Espinosa especialmente para la oportunidad.

“Con Farándula, de alguna manera, estaremos celebrando también el aniversario 15 de la sala Adolfo Llauradó, una sala imprescindible en el teatro cubano”, adelantó Vilá.

Farándula es entonces, en esencia, una vuelta a la raíz de Jazz Vilá Projects para conservar, de alguna manera, su sello y la espontaneidad de sus propuestas donde se ocultan las verdades y se gritan las mentiras.

En opinión de su director “es una comedia sabrosa, pero peligrosa, como la vida”.